Efectos nocivos del herbicida 2,4-D

Existen algunos datos epidemiológicos que demuestran que, en poblaciones rurales, la frecuencia de lesiones inflamatorias de origen infeccioso en el riñones es mayor en individuos expuestos a pesticidas. Estudios previos han demostrado que el herbicida 2,4- D altera las propiedades de adherencia bacteriana a riñón, mediada por fimbrias de Escherichia coli uropatógena, si bien aún no se ha estudiado el mecanismo que podría estar involucrado. El 2,4-D demostró capacidad de generar uniones covalentes a proteínas de bacilos gram negativos. Debido a este hallazgo, se hipotetizó que la unión del herbicida a proteínas involucradas en la síntesis, exportación o ensamble de las subunidades fimbriales podía alterar la expresión de las fimbrias. En este trabajo se demuestra una unión covalente del herbicida a proteínas de membrana externa de Escherichia coli uropatógena y paralelamente una disminución de la fimbriación, determinada por tres técnicas diferentes: hemoaglutinación, cuantificación de proteínas de superficie y microscopía electrónica. Una conclusión importante está referida a que la exposición accidental de trabajadores rurales al 2,4-D en muy bajas dosis y durante un corto período de tiempo tendría un efecto protector de la pielonefritis por disminución de la fimbriación; mientras que los altos niveles de exposición predispondrían a la recurrencia del proceso infeccioso en el modelo de la pielonefritis ascendente no obstructiva en ratón (Balagué et al., 2002). Probablemente los estudios epidemiológicos que asocian exposición a los herbicidas e infección renal estén relacionados con este último tipo de exposiciones.

Effect of the herbicide 2,4-dichlorophenoxyacetic acid on fimbriation of uropathogenic bacteria. Epidemiological data demonstrate, on rural populations, that the frequency of inflammatory lesions in renal tissue is higher for individuals exposed to pesticides. Previous studies demonstrated that the herbicide 2,4-D altered the bacterial adherence properties to renal tissue, mediated by fimbriae in uropathogenic Escherichia coli, but the mechanism involved is still unknown. The acid 2,4- D has the ability to perform covalent bonds to proteins in gram-negative bacteria. Because of this fact, we hypothesized that the 2,4-D acid binds proteins involved in the synthesis, export or ensemble of fimbrial subunits, modifying fimbrial expression. In this work we demonstrated a covalent bond of the herbicide to outer membrane proteins in uropathogenic E. coli and a parallel decrease of fimbriation, assayed by three different methods: hemmaglutination, surface protein quantification and electron microscopy. An important conclusion is that the accidental exposure of rural workers to 2,4-D may have a protective effect by a decrease in fimbriation, when it is used in low doses and during a short period of exposure. But, it must be considered that high doses and several days of exposure had adverse effects, like recurrence of infection, in the mouse model of ascending pyelonephritis (Balagué et al, 2002). Probably, the epidemiological studies that associate the herbicide exposure with renal infection were due to the last kind of exposure described

La exposición ocupacional a pesticidas puede aumentar el riesgo de infertilidad de los padres y generar resultados adversos del embarazo, como aborto espontáneo, parto prematuro y anomalías congénitas. Se sabe menos sobre el uso residencial de pesticidas y los riesgos que representan para la reproducción y el desarrollo. En el presente estudio, evaluamos exposiciones de baja dosis a agroquímicos y pesticidas para el cuidado del césped ambientalmente relevantes por sus efectos directos en el desarrollo del embrión de ratón antes de la implantación, un período correspondiente a los primeros 5 a 7 días después de la concepción humana. Los agentes probados fueron los que se usan comúnmente en el medio oeste superior de los Estados Unidos, incluidos seis herbicidas [atrazina, dicamba, metolacloro, ácido 2,4-diclorofenoxiacético (2,4-D)], pendimetalina y mecoprop), tres insecticidas (clorpirifos, terbufos y permetrina), dos fungicidas (clorotalonil y mancozeb), un desecante (diquat) y un fertilizante (nitrato de amonio). Se incubaron grupos de 20 a 25 embriones durante 96 horas in vitro con productos químicos individuales o mezclas de productos químicos que simulaban exposiciones encontradas al manipular pesticidas, inhalar o ingerir agua subterránea contaminada. La incubación de embriones con plaguicidas individuales aumentó el porcentaje de apoptosis (muerte celular) para 11 de 13 sustancias químicas (p Abstract

Occupational exposures to pesticides may increase parental risk of infertility and adverse pregnancy outcomes such as spontaneous abortion, preterm delivery, and congenital anomalies. Less is known about residential use of pesticides and the risks they pose to reproduction and development. In the present study we evaluate environmentally relevant, low-dose exposures to agrochemicals and lawn-care pesticides for their direct effects on mouse preimplantation embryo development, a period corresponding to the first 5-7 days after human conception. Agents tested were those commonly used in the upper midwestern United States, including six herbicides [atrazine, dicamba, metolachlor, 2,4-dichlorophenoxyacetic acid (2,4-D)], pendimethalin, and mecoprop), three insecticides (chlorpyrifos, terbufos, and permethrin), two fungicides (chlorothalonil and mancozeb), a desiccant (diquat), and a fertilizer (ammonium nitrate). Groups of 20-25 embryos were incubated 96 hr in vitro with either individual chemicals or mixtures of chemicals simulating exposures encountered by handling pesticides, inhaling drift, or ingesting contaminated groundwater. Incubating embryos with individual pesticides increased the percentage of apoptosis (cell death) for 11 of 13 chemicals (p

El ácido 2,4-diclorofenoxiacético (2,4-D), un herbicida de uso mundial, se ha asociado con una variedad de efectos adversos para la salud en humanos y diferentes especies animales. Aunque el mecanismo de la neurotoxicidad del 2,4-D aún se desconoce, anteriormente habíamos informado cambios en varios sistemas de neurotransmisores, como la serotonina (5-HT) y la dopamina (DA), que se propusieron mediar en algunos de los efectos conductuales en ratas. En el presente trabajo, examinamos el impacto de la exposición al 2,4-D en la ontogenia de los receptores dopaminérgicos de tipo D2 en la corteza prefrontal (PFc), cuerpo estriado (CPu), hipocampo (H) y cerebelo (Cer). Ratas preñadas fueron expuestas por vía oral a 70 mg/kg/día de 2,4-D desde el día de gestación (GD) 16 hasta el día 23 posparto. Después del destete, las crías se asignaron a uno de los dos subgrupos: T1 [alimentados con dieta no tratada hasta el día postnatal, (PD) 90] y T2 [mantenida con dieta 2,4-D hasta PD 90]. Se sacrificaron de cinco a ocho crías por edad y sexo a los 6, 15, 30, 45 o 90 días de edad para ensayos de unión al receptor de membrana empleando [3H]nemonaprida. La exposición subcrónica a 2,4-D (grupo T2) aumentó el receptor de tipo D2 de DA en alrededor de un 40 % en CPu. Además, los niveles del receptor tipo D2 de DA también aumentaron en PFc (15 y 30 días) y Cer (30 y 90 días). Se observaron diferencias dependientes del sexo en los receptores D2, siendo las ratas hembra T2 más afectadas que las ratas macho T2. Cuando se interrumpió el tratamiento con herbicida después del destete (grupo T1), la densidad del receptor de tipo D2 de DA aparentemente se recuperó y se estabilizó al nivel de control. Estos hallazgos sugieren una vulnerabilidad reversible de los receptores de tipo D2 a la exposición al 2,4-D. Los aumentos regionales de la densidad del receptor de tipo D2 pueden explicar ciertos comportamientos informados anteriormente por nosotros, como la catalepsia y la preferencia por girar a la derecha en ratas expuestas a 2,4-D.

2,4-Dichlorophenoxyacetic acid (2,4-D), a worldwide-used herbicide, has been associated with a range of adverse health effects on humans and different animal species. Although the mechanism of 2,4-D neurotoxicity remains unknown, we had previously reported changes in various neurotransmitter systems, such as serotonin (5-HT) and dopamine (DA), which were proposed to mediate some of the behavioral effects in rats. In the present work, we examined the impact of 2,4-D exposure on the ontogeny of dopaminergic D2-type receptors in prefrontal cortex (PFc), striatum (CPu), hippocampus (H) and cerebellum (Cer). Pregnant rats were orally exposed to 70 mg/kg/day of 2,4-D from gestation day (GD) 16 to postpartum day 23. After weaning, the pups were assigned to one of the two subgroups: T1 [fed with untreated diet until postnatal day, (PD) 90] and T2 [maintained with 2,4-D diet until PD 90]. Five to eight pups per age and sex were sacrificed at 6, 15, 30, 45 or 90 days of age for membrane receptor binding assays employing [3H]nemonapride. Subchronic 2,4-D exposure (T2 group) increased DA D2-type receptor around 40% in CPu. In addition, DA D2-type receptor levels also increased in PFc (15 and 30 days) and Cer (30 and 90 days). Sex-dependent differences in D2 receptors were observed with T2 female rats being more affected than T2 male rats. When the herbicide treatment was interrupted after weaning (T1 group), DA D2-type receptor density was apparently recovered and stabilized to control level. These findings suggest a reversible vulnerability of D2-type receptors to 2,4-D exposure. Regional increases of D2-type receptor density may explain certain behaviors reported early by us, such as catalepsy and right-turning preference in rats exposed to 2,4-D.

Se determinaron valores CL50 de 96 h de 2,4-D [(2,4-diclorofenoxi)ácido acético], un herbicida agrícola contaminante común, en la carpa común adulta (Cyprinus carpio L., 1758; Pisces, Cyprinidae). El estudio se realizó en dos etapas utilizando 130 carpas. Los datos obtenidos se evaluaron estadísticamente mediante el uso del programa informático de la EPA basado en el método de análisis Probit de Finney y se encontró un valor de LC50 de 96 h para C. carpio L., 1758 de 63,24 mg/l en un sistema de prueba de bioensayo estático. Los límites de confianza superior e inferior del 95 % para la CL50 fueron 55,03 y 71,92 mg/l, respectivamente. La temperatura del agua fue de 17±1 °C. Se examinaron los cambios de comportamiento de las especies antes mencionadas para varias concentraciones de herbicida.

A 96-h LC50 values of 2,4-D [(2,4-dichlorophenoxy)acetic acid], a common contaminating agricultural herbicide, were determined on the adult common carp (Cyprinus carpio L., 1758; Pisces, Cyprinidae). The study was conducted in two stages using 130 carp. The data obtained were statistically evaluated by the use of the EPA computer program based on Finney’s Probit Analysis Method and a 96-h LC50 value for C. carpio L., 1758 was found to be 63.24 mg/l in a static bioassay test system. 95% lower and upper confidence limits for the LC50 were 55.03 and 71.92 mg/l, respectively. Water temperature was 17±1 °C. Behavioral changes of the above mentioned species were examined for various herbicide concentrations.

Los herbicidas reguladores del crecimiento vegetal (PGR) dicamba (ácido 3,6-dicloro-2-metiloxibenzoico) y 2,4-D [(2,4-diclorofenoxi)ácido acético] pueden dañar gravemente la soja [ Glycine max (L.) Merr. ] por deriva o contaminación del tanque y reducir el rendimiento. A menudo, en disputas regulatorias, el tejido se analiza en busca de residuos de PGR. Sin embargo, las relaciones entre la reducción del rendimiento de grano y las concentraciones de residuos foliares en varios momentos después de la exposición no están bien documentadas. Este estudio de 2 años cuantificó la cantidad de dicamba y 2,4-D en el follaje de soja 0, 6, 12, 24 y 48 días después del tratamiento (DDT) cuando se trató con 1 a 20 % de 0,56 kg ae ha -1 [ Tasa etiquetada para maíz ( Zea mays L.)] en la etapa de crecimiento de tres hojas (V3) y determinó si estas concentraciones estaban correlacionadas con la tasa de aplicación inicial o el rendimiento de grano. Las concentraciones de herbicida se determinaron utilizando técnicas de cromatografía de gases/espectrometría de masas con control selectivo de iones. Los síntomas visuales fueron leves (<10%) a severos (90%) e incluyeron ahuecamiento de hojas, epinastia y en algunos casos, muerte de la yema apical. Los rendimientos de grano de las plantas tratadas con dicamba se redujeron del 14 al 93 % en comparación con el rendimiento de las plantas no tratadas, mientras que solo el 2,4-D a la tasa más alta redujo el rendimiento. En ambos años, las concentraciones de residuos foliares se correlacionaron con las tasas de aplicación inicial y la reducción del rendimiento hasta 24 DDT para dicamba y 12 DDT para 2,4-D, y todos los tratamientos tuvieron cantidades de residuos similares a las de las plantas sin tratar después de estos intervalos.

Plant growth regulator (PGR) herbicides dicamba (3,6-dichloro-2-methyloxybenzoic acid) and 2,4-D [(2,4-dichlorophenoxy)acetic acid] can severely injure soybean [Glycine max (L.) Merr.] by drift or tank contamination and reduce yield. Often in regulatory disputes, tissue is analyzed for PGR residue. However, relationships between grain yield reduction and foliar residue concentrations at various times after exposure are not well documented. This 2-yr study quantified the amount of dicamba and 2,4-D in soybean foliage 0, 6, 12, 24, and 48 d after treatment (DAT) when treated with 1 to 20% of 0.56 kg a.e. ha−1 [labeled rate for corn (Zea mays L.)] at the three-leaf (V3) stage of growth and determined if these concentrations were correlated to initial application rate or grain yield. Herbicide concentrations were determined using gas chromatography/mass spectrometry techniques with selective ion monitoring. Visual symptoms were slight (<10%) to severe (90%) and included leaf cupping, epinasty and, in some cases, death of the apical bud. Grain yields from dicamba-treated plants were reduced from 14 to 93% compared with untreated plant yield, whereas only 2,4-D at the highest rate reduced yield. In both years, foliar residue concentrations were correlated with initial application rates and yield reduction up to 24 DAT for dicamba and 12 DAT for 2,4-D, with all treatments having residue amounts similar to untreated plants after these intervals. The data suggest that plant samples should be collected as soon as possible after suspected PGR exposure for accurate detection and quantification of PGR residue.

1. Hay una diferencia significativa entre especies en la toxicidad del ácido 2,4-diclorofenoxiacético (2,4-D). El nivel oral sin efectos adversos generales (NOAEL) para la toxicidad crónica de 2,4-D en ratas es de 5 mg kg − 1 día − 1 y en perros es de 1 mg kg − 1 día − 1. La dosis máxima tolerada (MTD) en rata es de 150 y 75 kg − 1 día − 1 para machos y hembras, respectivamente. La MTD en perros es de 7,5 mg kg − 1 día − 1 para machos y hembras. 2. En un intento por explicar el aumento de la sensibilidad al 2,4-D en perros, se administraron dosis orales de 5 o 50 mg kg − 1 14 C-2,4-D a ratas y perros machos y hembras. Se investigaron las tasas y rutas de excreción junto con la toxicocinética plasmática y la biotransformación del compuesto. 3. La eliminación de la dosis radiactiva de 2,4-D del plasma de rata fue significativamente más rápida que en el perro. Los t½ aproximados fueron 1,3-3. 4 h para rata y 99-134 h para perro después de una dosis de 5 o 50 mg kg − 1, respectivamente. Esto condujo a grandes diferencias en el AUC calculado (0- ∝) 21-57 μ eq. h g − 1 para rata y 4889-5298 µg eq. h g − 1 para perro a 5 mg kg − 1, y 122-2358 µg eq. h g − 1 para rata y 34 110-44 296 µg eq. h g − 1 para perro a 50 mg kg − 1). 4. En ratas, la principal ruta de excreción fue en la orina. La excreción fue esencialmente completa después de 24 h para la dosis baja y después de 48 h para la dosis alta. Para el perro, la eliminación fue incompleta durante el período de muestreo con solo alrededor del 50% de la dosis recuperada. La orina fue la vía principal de excreción a la dosis baja, pero se excretaron cantidades casi iguales en la orina y las heces a la dosis alta durante 120 h. 5. En ratas, el 2,4-D no se metabolizó y se excretó en la orina como compuesto original. en perro, la dosis se excretó principalmente siguiendo el metabolismo. El 2,4-D en el perro se conjugó formando los conjugados de taurina, serina, glicina, ácido glutámico, cisteína, sulfato y glucurónido, más un metabolito no identificado, que se excretaron en la orina. El plasma, sin embargo, solo contenía 2,4-D no metabolizado. 6. Los resultados muestran que la carga corporal de 2,4-D en el perro es significativamente mayor que en la rata para una dosis equivalente, lo que es consistente con la mayor sensibilidad del perro a la toxicidad del 2,4-D.

1. There is a significant species difference in the toxicity of 2,4-dichlorophenoxyacetic acid (2,4-D). The oral no overall adverse effect level (NOAEL) for chronic toxicity of 2,4-D in rat is 5 mg kg1 day1 and in dog is 1 mg kg1 day1 . The maximum tolerated dose (MTD) in rat is 150 and 75 kg1 day1 for male and females, respectively. The MTD in dog is 7.5 mg kg1 day1 for males and females. 2. In an attempt to explain the increased sensitivity to 2,4-D in dog, male and female rats and dogs were orally dosed with either 5 or 50 mg kg1 14C-2,4-D. The rates and routes of excretion were investigated along with plasma toxicokinetics and biotransformation of the compound. 3. Elimination of the radioactive dose of 2,4-D from rat plasma was significantly faster than in dog. The approximate t½ were 1.3–3.4 h for rat and 99–134 h for dog following a 5 or 50 mg kg1 dose, respectively. This led to large differences in the calculated AUC(0–1) 21–57 m eq. h g1 for rat and 4889–5298 mg eq. h g1 for dog at 5 mg kg1 , and 122–2358 mg eq. h g1 for rat and 34 110–44 296 mg eq. h g1 for dog at 50 mg kg1 ). 4. In rat, the major route of excretion was in the urine. Excretion was essentially complete after 24 h for the low dose and after 48 h for the high dose. For dog, elimination was incomplete over the sampling period with only about 50% of the dose recovered. Urine was the principal route of excretion at the low dose, but about equal amounts were excreted in urine and faeces at the high dose over 120 h. 5. In rat, 2,4-D was unmetabolized and excreted in urine as the parent compound. In dog, the dose was excreted mainly following metabolism. 2,4-D in dog was conjugated forming the taurine, serine, glycine, glutamic acid, cysteine, sulphate and glucuronide conjugates, plus an unidentified metabolite, which were excreted in urine. Plasma, however, only contained unmetabolized 2,4-D. 6. The results show that the body burden of 2,4-D in dog is significantly higher than in rat for an equivalent dose, which is consistent with the increased sensitivity of dog to 2,4-D toxicity.

Objetivo: Evaluar la proliferación de linfocitos en sangre periférica (índice de replicación:RI) y la frecuencia de micronúcleos (MF) entre aplicadores de herbicidas 2,4-D. Métodos: Doce aplicadores que rociaron solo 2,4-D proporcionaron una muestra de sangre y orina al momento de la inscripción, varias muestras de orina durante la temporada de rociado y una muestra de sangre al final del estudio. Nueve controles proporcionaron muestras de sangre y orina al momento de la inscripción y al final del estudio. La cromatografía de gases/espectroscopia de masas en tándem determinó los niveles urinarios de 2,4-D y los ensayos estándar in vitro determinaron las puntuaciones de RI y MF. El RI y el MF del aplicador se compararon antes y después de la pulverización y con los controles. Resultados: Los aplicadores aportaron 45 muestras de orina con concentraciones que oscilaban entre 1,0 y 1700 (μg 2,4–D/g creatinina/l de orina) que aumentaron logarítmicamente (ln) a medida que aumentaba el tiempo de pulverización. El RI del aplicador aumentó después de la pulverización (p = 0,016), independientemente del consumo de tabaco y alcohol, y demostró una débil respuesta a la dosis con el aumento de los niveles urinarios de 2,4-D (p = 0,15). Entre los aplicadores de 2,4-D, los hemogramas completos previos a la exposición y los inmunofenotipos de linfocitos no fueron significativamente diferentes de las mediciones posteriores a la exposición. Conclusión: la concentración urinaria de 2,4-D, un biomarcador de exposición, puede estar asociada con el índice de replicación de linfocitos, un biomarcador de proliferación celular.

Objective: Evaluate peripheral blood lymphocyte proliferation (replicative index:RI) and micronuclei frequency (MF) among 2,4–D herbicide applicators. Methods: Twelve applicators spraying only 2,4–D provided a blood and urine specimen upon enrollment, several urine samples during the spraying season, and a blood specimen at the study's end. Nine controls provided blood and urine specimens upon enrollment and at the study's end. Gas chromatography/tandem mass spectroscopy determined urinary 2,4–D levels and standard in-vitro assays determined RI and MF scores. Applicator RI and MF were compared before and after spraying and with controls. Results: Applicators contributed 45 urine specimens with concentrations ranging from 1.0 to 1700 (μg 2,4–D/g creatinine/L urine) that logarithmically (ln) increased as spraying time increased. Applicator RI increased after spraying (p = 0.016), independent of tobacco and alcohol use, and demonstrated a weak dose-response with increasing urinary 2,4–D levels (p = 0.15). Among 2,4–D applicators, pre-exposure complete blood counts and lymphocyte immunophenotypes were not significantly different from post-exposure measurements. Conclusion: Urinary 2,4–D concentration, an exposure biomarker, may be associated with lymphocyte replicative index, a cell proliferation biomarker.

Aunque la exposición paterna a sustancias tóxicas ambientales probablemente desempeñe un papel en los resultados adversos del embarazo, hay pocos datos disponibles sobre el alcance de esta exposición. Se recogieron una muestra de semen y dos de orina de 24 horas de 97 granjeros de Ontario que habían usado recientemente los herbicidas fenoxi 2,4-D (ácido 2,4-diclorofenoxiacético) y/o MCPA (ácido [4-cloro-2-metilfenoxilacético). Ambas muestras fueron analizadas para 2,4-D utilizando una técnica basada en inmunoensayo. Aproximadamente el 50 % de las muestras de semen tenían niveles detectables de 2, 4-D (> o = 5,0 pph (ng/mL)). Los niveles de semen de 2.4-D se correlacionaron más estrechamente con la segunda de las dos muestras de orina. Aunque varios estudios midieron el 2,4-D en la orina de los aplicadores, este estudio es el primero en intentar medir los niveles de 2,4-D en el semen. Como estos pesticidas pueden excretarse en el semen, podrían ser tóxicos para los espermatozoides y ser transportados a la mujer y al embrión/feto en desarrollo. Se necesita más investigación para comprender cómo las prácticas de manejo de pesticidas pueden afectar los residuos de pesticidas en el semen y la relación entre los niveles observados y la salud reproductiva.

Although paternal exposures to environmental toxicants probably play a role in adverse pregnancy outcomes, few data are available on the extent of this exposure. One semen and two 24-h urine samples were collected from 97 Ontario farmers who had recently used the phenoxy herbicides 2,4-D (2.4-dichlorophenoxyacetic acid) and/or MCPA ([4-chloro-2-methylphenoxyl acetic acid). Both samples were analyzed for 2,4-D using an immunoassay-based technique. Approximately 50% of the semen samples had detectable levels of 2, 4-D (> or =5.0 pph (ng/mL)). Semen levels of 2.4-D were correlated more closely with the second of the two urine samples. Although several studies have measured 2.4-D in the urine of applicators, this study is the first to attempt to measure 2,4-D levels in semen. As these pesticides can be excreted in the semen, they could be toxic to sperm cells and be transported to the woman and developing embryo/fetus. Further research is needed to understand how pesticide handling practices can affect semen pesticide residues and the relationship between the levels observed and reproductive health.

OBJETIVO: Evaluar el efecto curativo de la terapia de hemoperfusión sobre la lesión del sistema nervioso central en pacientes con intoxicación por ácido 2,4-diclorofenoxiacético. PACIENTES Y MÉTODOS: Un total de 60 pacientes con intoxicación por ácido 2,4-diclorofenoxiacético se inscribieron en este estudio. Fueron admitidos en el Departamento de Emergencias del Hospital Popular Provincial de Qinghai de 2015 a 2018 y se dividieron aleatoriamente en dos grupos mediante el método de tabla de números aleatorios. Un grupo era el grupo de control (grupo de tratamiento de rutina) y el otro grupo era el grupo de tratamiento (la terapia de hemoperfusión se agregó sobre la base del tratamiento de rutina). Se utilizaron la puntuación de coma de Glasgow (GCS), la puntuación APACHE II y la puntuación MMSE para evaluar los efectos antes del tratamiento y 7 días después del tratamiento. Los resultados fueron analizados estadísticamente. RESULTADOS: Después del tratamiento, la GCS en el grupo de tratamiento fue más alta que en el grupo de control, mientras que la puntuación de APACHE II fue más baja que en el grupo de control, y la puntuación de MMSE fue significativamente más alta que en el grupo de control, con una diferencia estadísticamente significativa ( p<0,05). La tasa efectiva en el grupo de control fue solo del 26,67 %, y en el grupo de tratamiento fue del 86,67 %, con una diferencia estadísticamente significativa (c2=19,62, p<0,001). CONCLUSIONES: La terapia de hemoperfusión puede promover la recuperación del sistema nervioso central en pacientes con intoxicación por ácido 2,4-diclorofenoxiacético, reducir la lesión de otros órganos y reducir significativamente la mortalidad de los pacientes.

Objective: To evaluate the curative effect of hemoperfusion therapy on central nervous system injury in patients with 2,4-dichlorophenoxyacetic acid poisoning. Patients and Methods: A total of 60 patients with 2,4-dichlorophenoxyacetic acid poisoning were enrolled in this study. They were admitted to the Emergency Department of Qinghai Provincial People's Hospital from 2015 to 2018 and were randomly divided into two groups by random number table method. One group was control group (routine treatment group), and the other group was the treatment group (hemoperfusion therapy was added on the basis of routine treatment). Glasgow coma score (GCS), APACHE II score, and MMSE score were used to evaluate the effects before treatment and 7 days after treatment. The results were statistically analyzed. Results: After treatment, GCS in the treatment group was higher than that in the control group, while APACHE II score was lower than that in the control group, and MMSE score was significantly higher than that in the control group, with statistically significant difference (p<0.05). The effective rate in the control group was only 26.67%, and that in the treatment group was 86.67%, with statistically significant difference (c2=19.62, p<0.001). Conclusions: Hemoperfusion therapy can promote the recovery of central nervous system in patients with 2,4-dichlorophenoxyacetic acid poisoning, reduce the injury of other organs, and significantly reduce the mortality of patients.

En este trabajo se presentan cuatro pacientes que habían sido intoxicados por ácido 2,4 diclorofenoxiacético (2,4-D). El primer paciente, de 51 años, había intentado suicidarse tomando por vía oral 400 ml de una solución de 2,4-D al 40%. Ingresó en coma, 6,5 h después de la intoxicación. Se realizó hemodiálisis extracorpórea y la evolución de la enfermedad fue satisfactoria. El segundo paciente, de 80 años, había bebido accidentalmente 100 ml de una solución de 2,4-D al 40%. Ingresó en coma pocas horas después del envenenamiento. Se realizó hemodiálisis y hemoperfusión con resinas y la evolución de la enfermedad fue satisfactoria. Antes de la terapia anterior, el paciente tenía una concentración sérica de 2,4-D de 177 mg/100 ml. El aclaramiento de 2,4-D fue de 56,3 ml/min durante esta terapia. El tercer paciente, de 24 años, había bebido 200 ml de una solución de 2,4-D al 40% en un intento de suicidio, y también se sospechó intoxicación por paraquat. Ingresó 10 h después de la intoxicación e inmediatamente se realizó hemodiálisis y hemoperfusión: la evolución de la enfermedad fue satisfactoria. Al ingreso, la concentración de 2,4-D en suero era de 122,5 mg/100 ml y el aclaramiento de 72,9 ml/min durante el tratamiento. El cuarto paciente, de 50 años, había bebido accidentalmente 100-200 ml de una solución de 2,4-D al 40%. Ingresó en coma 3 h después de la intoxicación. Se realizó hemodiálisis y la evolución de la enfermedad fue satisfactoria. Al ingreso, la concentración de 2,4-D en suero era de 37 mg/100 ml y el aclaramiento de 68,7 ml/min. Al cuarto día del ingreso reaparece clínica de intoxicación por 2,4-D, con una concentración sérica de 43,9 ml/100 ml. La condición del paciente mejoró después de más hemodiálisis. En los dos primeros pacientes hubo un intervalo Q-T corregido prolongado durante el coma.

In this paper four patients are presented who had been poisoned by 2,4-dichlorophenoxyacetic acid (2,4-D). The first patient, aged 51 years, had attempted to commit suicide by taking orally 400 ml of a 40% solution of 2,4-D. He was admitted in a coma, 6.5 h after poisoning. Extracorporal hemodialysis was performed and the course of the illness was satisfactory. The second patient, aged 80 years, had accidentally drunk 100 ml of a 40% solution of 2,4-D. He was admitted in a coma a few hours after poisoning. Hemodialysis and resin hemoperfusion were performed and the course of the illness was satisfactory. Prior to the above therapy the patient had a 2,4-D serum concentration of 177 mg/100 ml. 2,4-D clearance was 56,3 ml/min during this therapy. The third patient, aged 24 years, had drunk 200 ml of a 40% solution of 2,4-D in a suicide attempt, and paraquat poisoning was also suspected. He was admitted 10 h after poisoning and immediately hemodialysis and hemoperfusion were carried out: the course of the illness was satisfactory. On admittance the concentration of 2,4-D in serum was 122.5 mg/100 ml, and clearance was 72.9 ml/min during treatment. The fourth patient, aged 50 years, had accidentally drunk 100-200 ml of a 40% solution of 2,4-D. He was admitted in a coma 3 h after poisoning. Hemodialysis was performed and the course of the illness was satisfactory. On admittance the concentration of 2,4-D in serum was 37 mg/100 ml and clearance was 68.7 ml/min. On the fourth day after admittance clinical signs of 2,4-D poisoning appeared again, with a serum concentration of 43.9 ml/100 ml. The patient's condition improved after further hemodialysis. In the first two patients there was a prolonged corrected Q-T interval during coma.